miércoles, 1 de marzo de 2017

Puntos Tung en oncología.

Puntos Tung para el cáncer? Acupuntura en oncología?


Cuál es el tratamiento para el cáncer con los puntos Tung? Hasta dónde llegamos con acupuntura en oncología?

Dao Ma del Maestro Tung Wei San Kuan.


Como indicaciones primarias Tung nos da los procesos oncológicos:
  • Cualquier tipo de cáncer
  • Especialmente cáncer de mama o pulmón
  • Tumores abdominales

Secundariamente nos comenta:
  • O.R.L. Amigdalitis, otitis, faringitis... (con la consideración concreta que podríamos hacer para cada caso, y su comparativa con otros dao ma como Ce Xia San Li o los Tres Zorros, o incluso los Metales de la pantorrilla....)
  • Aparato Locomotor: dolor escápulo-torácico, dolor hombro-brazo, epicondilitis... (afecciones las cuales volveríamos a distinguir respecto a otros puntos como los 7 Tigres del cual hemos hablado anteriormente, las 4 Flores....).
  • Y otras afecciones varias.
Es un Dao ma que tonifica el Qi pulmonar, dispersa éstasis de Xue y absorve Tan, desbloquea fuertemente el Qi.... De aquí podemos empezar a dilucidar du potencia. Si además su acción etiológica es sobre Metal y Madera...(recordemos que en el I Ching la madera no es únicamente madera, ni el metal únicamente metal... pero esto lo dejamos para otro día ;)

Su traducción significa Tres Puertas Exteriores. Este Dao Ma marca mucho la relación de tres fogones, con el cielo-hombre-tierra en la distribución de sus puntos a lo largo del lado externo de la pierna. Eso nos puede orientar a la hora de escoger uno de los tres puntos. El punto superior correspondería a nivel cielo, y por tanto su correspondecia o actuación, más dirigida a las zonas o áreas del cuerpo (cabeza), pero también hacia cualquier parte del organismo que sea la más “superior” con respecto a otras dos “medias e inferiores”. Así, las manos serían cielo con respecto a los pies. Y los dedos serían cielo con respecto a la mano, y la muñeca tierra con respecto a los dedos. Y la falange distal sería cielo con respecto a la falange proximal que sería tierra. Esto que así explicado parece un galimatías, me gustaría ampliarlo con este video sobre la técnica Mirror

Para qué se utilizaba este set de puntos.

Este set de puntos se utilizaba siempre para el tratamiento del cáncer. Y a pesar de que hay muchos puntos específicos en el sistema Tung para oncología, éste es el que siempre debe utilizarse al menos ocho de cada diez veces. Bilateralmente los seis puntos, como tratamiento único. A qué nos referimos con que estos puntos tratan el cáncer? En los países donde el enfermo puede elegir libremente si su tratamiento desea que se lleve a cabo por la medicina convencional o la alternativa (no llamada en tal caso complementaria, sino alternativa como es en el caso de Suiza), el tratamiento por acupuntura para el cáncer sería éste. En el resto de países, constituirá generalmente un complemento al tratamiento convencional. Qué podemos esperar de estos puntos en cuanto a eficacia, escapa al propuesto de este atlas. Puesto que debemos actuar con plena bioética y no sembrar falsas o desproporcionadas esperanzas, ni ofrecer resultados milagrosos. Con ello no echo por tierra la eficacia de las medicinas alternativas. Pero en los países en los que realmente constituye una alternativa se dan las siguientes condiciones contextuales: el profesional está regulado por ley en su formación teórica y práctica, garantizando una amplia experiencia; el paciente es conocedor de dónde debe tratar su dolencia pues existen clínicas y hospitales muy especializados en el tratamiento de enfermedades graves como el cáncer. Los terapeutas de estas clínicas tienen gran experiencia hospitalaria en estas enfermedades, y muchos de ellos son o comparten equipo con médicos convencionales y pruebas diagnósticas (alternativas y convencionales) avanzadas. El paciente es consciente y está informado en todo momento de los pros y contras, y de qué está consiguiéndose con el tratamiento. El paciente no salta sesiones, y puede asistir a diario a terapia, pues la mutua médica lo cubre igualmente. Si el paciente tiene una recaída o empeoramiento, puede seguir acudiendo al servicio de urgencias alternativo, y si fuera necesario y fuera la voluntad del enfermo, ser derivado desde ahí en ambulancia a un hospital tradicional (aunque suele disponerse de estos tratamientos y médicos en la misma clínica alternativa para estos casos). El tratamiento paliativo, cuando la lucha entre médicos y enfermo llega a sus últimos días (pensemos que no se ofrece una curación en ningún caso, con ninguna medicina alternativa ni convencional, sino un acompañamiento terapéutico para intentar curar o detener la enfermedad, o mejorar la calidad de vida), en estos días en que hay que afrontar ya la degeneración de los tejidos y la pérdida de la batalla final, el enfermo puede asistir o ser trasladado para tratamientos paliativos en cualquier clínica convencional especializada, sin ser culpabilizado, ni él ni la familia (qué hay peor para el enfermo en sus últimos días que pensar cómo se va a sentir la familia por sus decisiones tomadas y tomadas en su vida), por la opción escogida en su tratamiento alternativo en lugar de complementario. Todos estos requisitos además de los legales de cada lugar, son los que debemos recordar cada vez que un enfermo con cáncer nos consulta para ser tratados por nosotros. Ahora además quiero hacer una reflexión sobre el enfoque complementario para el cáncer. Sabemos que la experiencia del médico es vital. Que los datos analíticos, la evolución del enfermo ante una quimioterapia u otra, una frecuencia u otra determina mucho la forma de ser tratado por el oncólogo. Pero es que esta experiencia está basada en una base teórica y otra de ver miles de pacientes reaccionar de determinada manera. Qué pasa si el oncólogo se encuentra con resultados dispares, o dicho de otra manera, si alguien ajeno a él, realiza un tratamiento alternativo realmente tan eficaz, que el enfermo y sus datos diagnósticos incluidos, mejoren mucho y rápido. Qué pasa si esta mejoría el oncólogo lógicamente la asocia a su tratamiento (y cómo sabemos nosotros que es por nuestra terapia, ¿acaso podemos asegurarlo?). Y si el paciente nos salta una sesión o varias porque no se encuentra bien, y disminuye nuestra supuesta eficacia, entonces pasa lo siguiente: los síntomas y datos analíticos que se encuentra el oncólogo no le cuadran. O cuadran de otra manera a la que hubieran encajado de no ser por esta montaña rusa de tratamientos no coordinados. No podemos escudarnos en que la culpa es de los oncólogos que no quieren ver más allá. Esto es absurdo e injusto ante el paciente que está intentando sobrevivir, que perdamos el tiempo echando la culpa a alguien. Ya conocemos la situación legal y contextual del paciente. Ahora que vamos a decidir: anular en parte la experiencia del oncólogo con nuestro tratamiento que no podemos testar al 100% su eficacia ni si lo estamos haciendo bien (frecuencia de sesiones, puntos escogidos, etc.) o no hacer nada? Está claro si más no, que no podemos ofrecer una cura al cáncer con estos puntos. Y que la decisión a esta pregunta que acabo de formular es sencilla para nosotros. Y es sencilla para nosotros, porque no nos toca a nosotros decidir. Es el paciente el que debe conocer todo esto, y reflexionar, comentarlo incluso con su familia, y entonces tomar esta decisión. Quizá escoja un oncólogo que realice ambas terapias, quizá escoja una sola de ellas, quizá se vaya a otro país a tratarse si puede permitírselo…. nos toca a nosotros apoyarle en su decisión en la que se juega la vida (aunque sea un solo día más de vida, es lo que pide cualquier persona en esta grave situación, “vivir aunque sea un día más”) y no condicionarle de ninguna manera. Informar, educar, y dejarle decidir. Trabajar con él entonces sin hacerle sentir culpable, o si no podemos o queremos llevar a cabo su propuesta indicarle que nosotros no queremos o podemos, pero que no quiere decir que sea una mala decisión. Estar ahí en cualquier caso, y seguir así. Pienso sinceramente que el amor por el enfermo debe tener este aspecto incondicional de ayuda y acompañamiento. Y es por esto que me he extendido en este largo párrafo.

Existen más puntos y tratamientos en acupuntura Tung para oncología. Pero si al enfermo de cáncer, la ayudamos con el tratamiento que esté siguiendo estimulando estos seis puntos y verificando su eficacia bien por los síntomas, bien por el diagnóstico abdominal energético, bien por el pulso y la lengua, etc. hallaremos una opción realmente eficaz para los síntomas, paliativa, acompañante a su tratamiento convencional, e incluso en aquéllos que no pueden seguir siendo tratados convencionalmente, quizás les consigamos resultados esperanzadores. Y la esperanza es lo que jamás le hemos de quitar al paciente. No la falsa expectativa, sino la esperanza. 


Diferenciación entre Tres Pesos y Wei San Kuan:



  • Ambos sets de puntos rompen fuertemente el Qi bloqueado. 
  • Los Tres Pesos tonifican el Bazo, y se localizan entre canales de Yang Ming (Estómago) y Shao Yang (Vesícula Biliar). 
  • Wei San Kuan tonifica el Pulmón, y se localiza sobre el canal Shao Yang. 
  • Un diagnóstico taoísta de la palma de la mano ayudará a escoger entre Pulmón-Bazo / Jiao Superior-Jiao Medio / Qi respiratorio-Qi nutritivo. 
  • En cualquier caso el Maestro Tung para el tratamiento del cáncer prefería Wei San Kuan.
  • La distribución de los tres puntos en la pierna por parte de Wei San Kuan, en comparación a Tres Pesos, nos dan una imagen de totalidad, mirror, tres niveles mucho más completa. Si realizamos un desbloqueo intenso, un drenaje del Tan, y una tonificación fuerte, implicando en profundidad y totalidad a los tres niveles corporales, no es de extrañar que fuera y se el preferido y el “escogido” para tratar los tumores. Pues un tumor se ve como un estancamiento fuerte de Qi-xue, tan + calor/frío según el caso, y una acción proliferativa desordenada, caliente, “contagiosa” en el seno del mismo cuerpo, como el tan, impredecible. “Toda patología extraña, caótica y de lucha imposible se debe al Tan”.
  • Para tratar enquistamientos encuentro más eficaz los Tres Pesos. Para calcificaciones del hombro también. Para oncología en general prefiero Wei San Kuan.